
Pedro Ruiz
La isla china de Hainan es un territorio de contrastes. Las aguas cristalinas, las arenas blancas y los imponentes hoteles modernistas le convierten en un paraíso. Un edén copiado, como no podía ser de otra manera, de la isla de Honolulu por funcionarios del Gobierno en la década de los ochenta. El reducto también es un epicentro de boutiques de lujo atraídas por su laxa fiscalidad. Por último, todo ello está aderezado la presencia militar, ya que es un punto estratégico. De hecho, no es raro comprobar como te puedes comprar una joya única en Cartier, mientras a lo lejos se divisa un submarino atómico cargado con una docena de misiles capaz de destruir el mundo.

¡BIENVENIDOS A HAINAN!
Las tonalidades verdes emergen con fuerza entre el blanco puro que domina la sala. En la parte central sobresale un mostrador de mármol flanqueado por hasta siete cajas de cristal blindado. Unos rectángulos impenetrables que exhiben algunas de las joyas, casi elevadas a obras de arte, con el sello de la casa francesa Boucheron, del grupo de lujo Kering. La boutique, además, esconde un secreto en forma de salón VIP privado. Ningún detalle se deja al azar en la apertura más importante de la firma en 2021, en el complejo comercial libre de impuesto Sanya International, en Hainan (China).
Ni siquiera, obviamente, la fecha: el 5 de septiembre. De hecho, ese mismo mes, siempre lo es, fue particularmente ajetreado en la región de Hainan. El día 17, la firma de joyería Queelin inauguraba también su nueva boutique. Una semana más tarde, la inauguración corría a cargo de Panerai con una tienda de 67 metros cuadrados. Un local totalmente renovado, que ha adoptado un nuevo diseño inspirado en el mundo submarino, con un interior en el que predominaban el bronce, la madera y el mármol. La lista no acaba ahí, ya que otras como Chopard o Longines hicieron lo propio.
Pero, ¿por qué septiembre? La respuesta es que todo debía estar listo para la que puede ser la semana más importante del sector del lujo. Al menos, en lo referente a Asía y, más concretamente, a China. Así, el pasado año la Semana Dorada, el periodo de siete días de vacaciones en el país para celebrar el Día Nacional se extendió del 1 al 7 de octubre. La fecha, el primero de octubre, marca la proclamación del aniversario de la República Popular China en 1949, y es uno de los momentos destacados para el turismo.
En 2021, como en 2020, la inmensa mayoría de viajeros chinos se quedaron en el país, dadas las estrictas restricciones. Un hecho que da respuesta a uno de los grandes interrogantes en esta historia: ¿Por qué Hainan? Al fin y al cabo, se trata de uno de los destinos turísticos favoritos para los chinos por sus aguas cristalina, playas de arena blanca y agradables temperaturas. De hecho, es conocida coloquialmente como la Hawái china. Aun así, queda una última cuestión: ¿Por qué es tan importante para el lujo la isla de Hainan?
La respuesta corta es que su atracción turística y su laxa fiscalidad le han convertido en el lugar preferido por los consumidores de lujo chinos. Así, en la actualidad se ha convertido en una zona vital para las marcas. Pero no solo de joyas, sino a nivel grupo. De hecho, el grupo francés LVMH abrió también en la isla china dos tiendas: una de su agencia de viajes de lujo, DFS, y una tienda de su reconocida casa de coñac Hennessy. Una a una, ninguna quiere quedarse atrás. Hasta el punto de que Hainan congrega casi más firmas de lujo por metro cuadrado que calles emblemáticas como la Quinta Avenida de Nueva York o en la Avenida Montaigne de París.
Aunque hay una pequeña diferencia. Y es que los clientes de las lujosas marcas salen de esas tiendas sin equipaje, como si simplemente hubieran visitado un museo. La razón es que los paquetes son enviados directamente al aeropuerto o a los propios hogares. Así, se maximiza el ahorro en impuestos. Hainan se beneficia de unas reglas dictadas hace décadas que la transformaron en una zona separada de China Continental. Un estatus que la convierte es una zona prácticamente libre de impuestos, gracias a una triple exención fiscal, que permite que aquellas compras por debajo de 15.500 dólares, unos 13.750 euros, no estén sujetas a carga tributaria.

HAINAN DESPUNTA POR ENCIMA DE HONG KONG
En pocas palabras, se trata de la nueva Hong Kong, pero sin el ajetreo incesante, ni el estrés que parece nunca desaparecer y, por el contrario, un entorno de ensueño. De hecho, Hainan es la única isla tropical de China. Por último, se está viendo beneficiada de los problemas internos, sobretodo políticos y a nivel de represión que está padeciendo la ciudad. “Hong Kong continuó su tendencia a la baja. Los turistas chinos, que representaban la mayoría de los clientes de artículos de lujo de Hong Kong, trasladaron sus gastos a China continental, en particular a la provincia de Hainan”, explican desde Kering.
Ahora, Hainan es la principal zona de compras libres de impuestos prácticamente del mundo. Incluso superando a Suiza. De hecho, a lo largo de 2020, China Duty Free, un grupo controlado por el estado que se dedica a la venta de productos libres de impuestos, se disparó en Bolsa destrozando cualquier registró anterior. En concreto, la capitalización del grupo se multiplicó hasta por ocho a principios de 2021, respecto a 2019. Además, la compañía desteronó a Dufry, el conglomerado suizo, como el mayor proveedor mundial productos de lujo libres de aranceles.
Ese estatus se puede apreciar también en el volumen de ventas en la región y en las cifras de las propias compañías. Las transacciones agregadas en la isla por el sector del lujo alcanzaron los 5.000 millones en 2020, el doble que en 2019. Pero seguramente serán todavía más alta en este 2021. Mientras, por su parte, algunos grupos marcas como Gucci o Prada registraron crecimientos del 40% de las ventas en sus divisiones de Asia, sin contar Japón, en parte, favorecidos por el derroche chino en Hainan.




HAINAN ESCONDE UNA BASE MILITAR SECRETA A POCOS KM DE LA PLAYA
Pero Hainan es mucho más que un complejo de vacaciones para superricos. También es una zona geoestratégicamente muy importante, lo que hace que su historia sea todavía más curiosa. Así, la parte sur de la isla, la zona de Sanyan donde están las principales boutiques, domina lo que es el mar Meridional de China, un punto estratégico para canalizar la proyección del país hacia el sudeste asiático. También, es en parte la puerta de entrada para incursiones hacía el Océano Índico o el Pacífico.
Esa privilegiada posición llevó a la isla a ser una base de operaciones de la marina china. De hecho, en la bahía de Yalong, la zona más reconocida de las playas de Hainan, era un campo de entrenamiento para los marines. Aunque en 1980 los líderes decidieron convertirlo en un punto turístico. En esta historia sobresale el nombre de Zhang Aiping, el ministro de Defensa de la época, que convenció al resto de comandantes y políticos para convertir la isla en un balneario gigante. Pero esa esencia China iría mucho más allá. De hecho, el propio Aiping, entre otros, envió un destacamento a Honolulu para copiar la isla en un principio.
Con el paso de los años, la zona fue atrayendo a cada vez más turistas más pudientes hasta ser un epicentro del lujo. Una transformación que, sin embargo, no ha cambiado los planes militares chinos. La isla tiene una zona de lanzamiento de cohetes, y a pocos kilómetros de la costa se construyó una nueva base militar oculta, sustituyendo una más antigua. Un emplazamiento que haría las delicias de cualquier espía. De hecho, un grupo de ellos, de origen estadounidenses, fueron descubiertos y retenidos en la isla en abril de 2001, lo que supuso un conflicto internacional. Ahora, les más fácil pasar desapercibidos, simplemente hay que tener buen gusto para la moda y el lujo. Perfecto, quizás, para una nueva secuela de James Bond.